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martes, 30 de julio de 2013

¿QUE PASA SI NO TE DESMAQUILLAS DURANTE UN MES? (FOTOS)

Que levante la mano la mujer que jamás se haya acostado con el maquillaje puesto.
Apenas nadie ¿verdad? Alguna vez en nuestras vidas pecamos de pereza y derrotadas por el sueño y el cansancio, nos arrastramos hasta la cama sin fuerzas para dedicarle tiempo a la limpieza de nuestra piel.
Otras veces, directamente lo olvidamos, o bien porque nos hemos quedado dormidas en el sofá. ¿Y cuántas veces nos habremos ido directamente a la cama, incluso con la ropa de calle puesta, después de llegar de una fiesta muy loca?
 


Según una encuesta llevada a cabo en Reino Unido, un tercio de las mujeres confesaron dormir sin desmaquillarse al menos dos veces por semana, aun siendo conscientes de que eso les perjudica y envejece la piel (rojeces, granos, sequedad, pestañas quebradizas…). Pero qué mala es la pereza…
La periodista Anna Pursglove ha hecho un experimento para el Daily Mail, y ha estado un mes entero sin quitarse el maquillaje por las noches y aplicándose nuevas capas cada mañana para demostrar los daños que provoca el no desmaquillarse diariamente.
Todas las mañanas se daba una ducha rápida solo con agua, no empleaba productos desmaquillantes. Además, visitó a un experto para tomar muestras y hacer el seguimiento del deterioro que iba sufriendo su piel.

Una semana después
Según iban pasando los primeros días del experimento, Anna empezó a notar los síntomas de la ausencia de limpieza de su piel:
Pequeños quistes blanquecinos alrededor de las pestañas.
Piel seca y tirante, sensación de llevar una máscara puesta.
Cara de cansada.
Piel levantada y grumosa. Dificultad para aplicar nueva base de maquillaje.
Pestañas pegadas entre sí, difícil de aplicar nueva máscara.
Pérdida de algunas pestañas.

Un mes después
Finalizado el reto, Anna volvió al especialista para un exhaustivo examen de su piel y evaluar los daños. Descubrió que su piel había envejecido 10 años en solo un mes.
Estos son los resultados:


La piel estaba un 10% peor y menos tersa en la frente (un 20% más en el lado derecho del rostro, probablemente por dormir sobre este lado, evitando la oxigenación de la zona y acentuando los problemas que van surgiendo sobre la piel) y un 5% menos hidratada por no aplicarse diariamente la crema hidratante. Además, la capa de maquillaje acumulada sobre la piel ralentizaba la regeneración de la piel.
Debido a la sequedad de la piel y su consiguiente falta de elasticidad, las arrugas se acentuaron y se volvieron más profundas. Pero no aparecieron nuevas marcas.
La piel se mostraba un 2% más irritada de lo normal, por lo que las rojeces eran más visibles. Una vez más, la capa de maquillaje que encerraba la superficie de la piel intensificó las reacciones alérgicas.
Los poros estaban un 5% más dilatados de lo que estaban un mes antes por culpa del atasco de maquillaje y suciedad incrustada que va dilatándolos poco a poco. Esto desvelaba un envejecimiento de la piel, ya que con los años los poros se van agrandando por la pérdida de elasticidad de la piel.
Afortunadamente, al tratarse de un periodo de tiempo corto, los daños no son permanentes y su piel irá recobrando su firmeza poco a poco. No obstante, esta práctica continuada en el tiempo sí que puede provocar daños a largo plazo (como aquella joven que se tiró dos años sin desmaquillarse y descubrió que estaba el doble de vieja), especialmente por la acumulación de suciedad y contaminación ambiental sobre la piel, generando los radicales libres que destruyen el colágeno y la elastina; es decir, las estructuras sobre las que se sujeta nuestra joven piel.
Me da tanta pereza desmaquillarme a veces… ¿qué puedo hacer?
Al igual que hemos adquirido el sano hábito de lavarnos los dientes antes de acostarnos (quienes lo hacen, al menos), también debemos acostumbrarnos a desmaquillarnos cada noche. Es más, la esteticista Ana Cristina Olano recomienda hacerlo tras lavarnos los dientes: “Podemos aprovecha ese viaje al lavabo para ya de paso también quitarnos el maquillaje de la cara”.
Lo ideal es limpiarse la cara con agua jabonosa, algo muy suave especial para la cara, y luego hidratarse con crema. Pero a veces nos da miedo entrar en contacto con el agua, por miedo a que nos vaya a robar el sueño o por pura vagancia. “Ya como último recurso, podemos usar una toalla de estas de usar y tirar. Nos la pasamos por la cara y listo, siempre es mejor que nada. Pero no son las que más me gustan”.



 YA SABES, ANTES DE DORMIR, DESMAQUILLAR.

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